viernes, 2 de mayo de 2008

UN SECRETO, EL REFUERZO DE UNA AMISTAD


Supongamos que te cuentan un secreto. No uno cualquiera, un secreto de verdad, de los que sólo se cuentan a tres personas en la vida. Y una de ellas eres tú. Supongamos que te lo cuentan en una noche como la de ayer y, desde entonces, la idea te da mil vueltas por la cabeza. Quizás sea el secreto más importante que me hayan contado, pienso, en el que más implicación hay por parte de quien me lo ha contado. Quizás sea una gran prueba de la amistad que me une a esta persona, un peldaño más en nuestro encumbramiento de la hermandad. Es un secreto que guardar, algo que preservar. Prometo ser fiel a él, con la misma vehemencia con la que me gustaría que mis más fieles amistades velasen por aquellos secretos que algún día les conté, animándoos a que hagáis lo mismo. Prometo responder a la confianza que deposita en ti quien te cuenta semejante confidencia, aunque siempre le tiente a uno la curiosidad de compartirlo, como cuando el agua tiende a escaparse por la presión. Pero una amistad es un tesoro que se revaloriza con la franqueza y la hermandad que dos personas se transmiten. Y lo de ayer ha sido una prueba de ello. Más de una década sin vernos para que un reencuentro casual (¿o causal?) conduzca a una confianza reforzada en el otro, como si, aunque no nos hubiésemos visto en tanto tiempo, éste hubiese estado haciendo de su parte. Esto a mí, amigo, me otorga confianza en ti, todavía más de la que tenía, y solidifica una relación que a uno le ilusiona, porque la amistad es el gran tesoro con el que contamos, la necesaria relación que tantos beneficios nos otorga. Prometo ser una caja blindada, una caja en la que guardar el tesoro que me brindas. Prometo serte fiel, viejo amigo, para que nunca te arrepientas de habérmelo contado.




Dedicado a todos los grandes amigos que tenéis.

6 comentarios:

Luna Carmesi dijo...

Una inmensidad de entrada!!!
Ese concepto de verdadero secreto tan sabiamente expresado...
Yo ahora soy portadora de un secreto... curiosamente de alguien que no puede considerarse como una amistad de toda la vida, sin embargo necesito mi hombro, mi oido, mi atención para compartir ese algo que atenazaba sus pensamientos... Reconozco que me hizo sentirme bien que alguien depositara ese nivel de confianza en mi!

Besos!

Blasfuemia dijo...

Los secretos que me cuentan los guardo tanto y tan bien que hasta se me olvida que me los han contado.. ;)

Fiel, es lo que define al amigo.

Cyllan dijo...

Señor caja blindada :) Que suerte tienen tus amigos, porque la fidelidad es indispensable, no se puede estar hoy aquí y mañana allá. Jolines el más importante que te han contado, uff, que se mueran los cotillas! jaja.

Unknown dijo...

Hay que ver que curioso es el ser humano. A menor nivel de relación con una persona (entiéndase cotidiana, en gran parte), mayor propensión a compartir lastres con el/la incauto/a.
De todos modos, es un alivio estratégico que solo da beneficios, la verdad sea dicha.

Siempre mío,
Capitán Mazas.

Jon Doe dijo...

Abismo, que suerte tiene tu amigo de tener un amigo que se tome la amistad tan en serio... (vamos, que la parte contratante de la segunda parte no es la...)

Un abrazo.

Abismo Ínfimo dijo...

Luna: exageras con tus palabras, pero de veras que halagan. Tú lo has dicho, el nivel de confianza que depositan en uno. Si proviene de alguien a quien aprecias, desde luego que uno queda gratificado. Muaks.

Blasfuermia: en tu particular e inteligente mirada, apuesto que debes ser una gran amiga.

Cyllan: los cotillas me presionaron, aunque yo me cerré en banda, y continuaré haciéndolo. Lo más que puedo contar es que me contaron un gran secreto.

Capitán Mazas: en varias ocasiones me he dirigido a un extraño y le he contado los capítulos más íntimos de mi vida. En multitud de otras, me he dirigido a conocidos de toda la vida y no les he podido contar nada. Generalmente, desahogarse es un placer, aunque a veces uno se desenmascara y entra en un particular ahogo. Me alegran tus paseos por esta casa. Una pregunta, ¿tú tienes blog?

Jon Doe: ¡qué cachondo!. La parte contratante que aquí se muestra apuesta por la amistad como si de uno de los grandes valores humanos se tratase. Seguro que tus "contratos" rebosan igualmente de semejante actitud. Un abrazo, jon doe.


¿Quién será el primero en poner esta casa perdida de zumo de tomate?